Hay regalos que se dan y se olvidan. Hay regalos que se dan y regresan. Este es el caso de Richard Gonzmart y los hermanos Julio y Elsi Rodríguez. Era el verano de 1994 y el joven Julio se graduaba de la escuela secundaria. No tenía seguro cómo pagaría sus estudios, pero una cosa sí sabía, y era la importancia de ir a la universidad y adquirir un título universitario. Eso se lo había inculcado su madre, Esther Rodríguez, una modesta mujer que se sacrificaba día y noche trabajando como costurera para proveer por sus hijos y para que pudieran concentrarse en sus estudios escolares. Julio y Elsi escucharon a su madre y ambos se graduaron con excelentes notas, cosa que reconoció el programa de becas de USF, Latino Scholarship.
En otro hogar, otra madre, Adela Gonzmart, dueña del legendario restaurante Columbia Restaurant en Ybor City, conversaba con su hijo, Richard Gonzmart, acerca del papel importante que juega la educación para el desarrollo económico de toda persona y la falta de acceso a los recursos necesarios que hace que muchas familias no puedan mandar a sus hijos a la universidad. Era una causa sumamente importante para Adela quien, junto a otros líderes comunitarios, había establecido el programa de becas en USF para que jóvenes del área de la Bahía de Tampa con aspiraciones de entrar a la universidad pudieran hacerlo. Así fue como le pidió a su hijo que se uniera auspiciando personalmente a un joven latino. Este compromiso se convirtió en una misión de vida para Richard.
Julio Rodríguez fue su primer becado. Mientras tanto, Elsi Rodríguez, hermana de Julio, era auspiciada por Adela. Todo se quedó en la familia, como dicen, y la beca se convirtió en un magnífico ejemplo de cómo una familia puede ayudar a otra a cumplir sus sueños.
Julio y Elsi terminaron sus estudios no sólo con excelentes notas, sino que ambos se graduaron con distinción. Ya graduados en ingeniería, tuvieron carreras exitosas e hicieron sus propias familias.
Todo podría haber terminado ahí…pero no fue así. La generosidad de la familia Gonzmart había dejado una marca endeble en la mente de Julio y Elsi.
En agosto del año pasado, Julio y Elsi hicieron otro sueño realidad. El sueño de devolver el regalo que Richard y Adela le entregaron a ellos: una beca universitaria.
"Fuimos los primeros de mi familia en ir a la Universidad. Ahora quiero darle ese mismo regalo que me dieron a mí a otros estudiantes", dijo Julio. Muy emotivos, la familia entera, hizo entrega de esa beca que ellos dedican a su madre y que representa el cierre de un capítulo y el comienzo de otro. Al cerrar con broche de oro ese compromiso que tenían con la familia Gonzmart se convirtieron, los Rodríguez, en los protagonistas de otro bello y prometedor capítulo. Ahora son ellos los proveedores de la beca y los que comparten su tiempo y sus experiencias con sus nuevos estudiantes.
Richard Gonzmart, por su lado, no pudiera estar más orgulloso de este final feliz. Por casi dos décadas se ha dedicado a donar fondos para el programa USF Latino Scholarship, para que más estudiantes como Julio y Elsi puedan cursar sus estudios sin obstáculos financieros. Su madre, quien falleció en el 2001, no sin antes ver a Elsi obtener su título universitario, sembró en su hijo el amor por ayudar al prójimo. Esta lección ha llevado a Richard a establecer varios fondos de becas a través del programa Latino Scholarship. El primer fondo fue el que estableció para honrar la memoria de su madre y su padre, Adela y Cesar Gonzmart. Luego estableció otro para celebrar el 100 aniversario del Columbia Restaurante hace unos años y el más reciente fue el que inició en su propio nombre y el de su esposa Melanie.
Sin embargo, todo comenzó con una beca. Y esa beca fue suficiente para cambiar por siempre la trayectoria de la vida de un joven y su familia.
"Mi madre me enseñó que los grandes logros traen consigo gran responsabilidad. Es mi misión la de ayudar a los que lo necesitan. Todavía recuerdo las palabras de Julio cuando lo conocí y me contó que estando a punto de graduarse de la escuela secundaria todavía no sabía si iba a poder pagar por la universidad. Más impactante aún fue oírle decir que en ocasiones y por falta de recursos temía terminar trabajando en los campos de cultivo y no en la universidad."
Esto llevó a Richard a convertirse en uno de los filántropos más comprometidos con el programa y con el mayor número de estudiantes.
Hoy Julio y Elsi les abren camino a otras familias mientras siembran las mismas semillas de generosidad en su pequeña familia.
Hay regalos que se dan y se olvidan. Hay regalos que no se olvidan jamás. Y hay regalos que se dan y regresan.
Sánchez es directora de Diversidad e Inclusión en USF y directora del Latino Scholarship.
Para contribuir al programa por favor contactar a Sánchez (813) 974-3827 o Luz Randolph (813) 974-6766. Para aprender más acerca de cómo calificar para el programa visite la página web Foundation.usf.edu/lsp