MIAMI — La madre de Andy Vila recuerda a su hijo como un pequeño inteligente y rebelde al que le gustaban los libros de Harry Potter y vestirse como el presidente de Estados Unidos. Pero cuando empezó a adoptar la misma ideología de la que su familia huyó en la Cuba socialista, le rogó en vano que dejara su activismo político.
Su socialismo hizo que Vila fuera atípico en su comunidad de la ciudad de Miami y provocó profundas divisiones con sus familiares. Fue exiliado por un breve tiempo de su casa, y su madre fue a terapia para superar sus diferencias. Mencionar el socialismo en las cenas familiares es algo "prohibido", comentó Vila. Sus familiares lo veían "raro y me decían: 'Hemos escapado de eso'".
Vila, de 21 años, es parte de una ola de jóvenes estadounidenses que apoyan abiertamente el socialismo, incluso entre los cubanos anti-izquierdistas. Aunque la definición de la ideología varía ampliamente, está haciendo avances particulares entre los millennials y los votantes de la Generación Z, que se prevé representen el 37% del electorado estadounidense para las elecciones de 2020, de acuerdo con el Centro de Investigación Pew.
Con más de la mitad de estadounidenses que rechazó el socialismo en una encuesta reciente de Gallup, un 43% de los encuestados dijeron que una versión del socialismo sería buena para el país. La popularidad de los autoproclamados socialistas demócratas como el senador Bernie Sanders o la representante Alexandria Ocasio-Cortez ha influenciado a los candidatos demócratas rumbo a los comicios de 2020, varios de los cuales dijeron que apoyan parcialmente políticas de estilo socialista.
Vila emigró de Cuba con sus padres en 2004, recibiendo el asilo y un camino hacia la ciudadanía. Al principio era optimista sobre un país donde todo parecía posible. Sin embargo, se decepcionó del sueño estadounidense luego de que su familia perdió su casa durante la recesión.
Los estadounidenses que alcanzaron la mayoría de edad durante la última recesión a menudo quieren que haya un papel del gobierno más amplio en la política social. Mencionan salarios estancados, deuda de préstamos estudiantiles y una disminución en los seguros de salud y pensiones de los empleados, de acuerdo con Edwin Amenta, profesor de sociología de la Universidad de California en Irvine.
Los jóvenes estadounidenses se sienten menos amenazados por el socialismo que otras generaciones más grandes, que podrían asociarlo con la Unión Soviética o con el régimen chino, comentó.
"El socialismo de hoy para la gente joven significa el sistema de salud canadiense y el estado de bienestar sueco", puntualizó Armenta.
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