Foto de DIRK SHADD / Times
Carteles de votación frente a la Casa Episcopal de Oración de Santiago Apóstol el día de las elecciones en Tampa en marzo de 2023.
WASHINGTON – La Cámara de Representantes de EE. UU. aprobó el miércoles un proyecto de ley que exigiría a las personas que se registran para votar proporcionar prueba de ciudadanía para participar en elecciones federales.
La legislación, aprobada con 221 votos a favor y 198 en contra, también requeriría que los estados revisen sus registros de votantes para verificar la presencia de no ciudadanos registrados.
El Acta de Salvaguarda de la Elegibilidad del Votante Americano, o SAVE, tiene como objetivo evitar que los no ciudadanos voten. Este acto ya es ilegal, ya que, según la ley estadounidense vigente, solo los ciudadanos pueden votar en las elecciones federales, pero la Ley Nacional de Registro de Votantes de 1993 prohíbe a los estados confirmar el estatus de ciudadanía.
Las leyes de votación varían según el estado, con algunos estados como Georgia y Wisconsin que requieren identificación con foto y otros, como Pensilvania y Nuevo México, que no requieren documentación en absoluto.
Los estados que exigen identificación con foto u otros documentos utilizan licencias de conducir, tarjetas de identificación militar, tarjetas de identificación estudiantil, certificados de nacimiento, tarjetas de identificación tribal o incluso una factura reciente de servicios públicos.
La Ley SAVE, introducida por el representante republicano Chip Roy de Texas en mayo, requeriría que la mayoría de las personas tengan un pasaporte para registrarse para votar.
Según los datos del Departamento de Estado, solo alrededor del 48% de los ciudadanos estadounidenses tienen pasaporte. Las licencias de conducir y las tarjetas de identificación tribal típicamente no prueban la ciudadanía de una persona y no podrían usarse para registrarse bajo la Ley SAVE.
Los datos también indican que la votación de no ciudadanos no es un problema prevalente, como han dicho muchos republicanos de la Cámara.
Según Associated Press, estados como Carolina del Norte, Georgia, Arizona, California y Texas revisaron sus registros de votantes entre 2016 y 2022. Estas auditorías encontraron que menos de 50 no ciudadanos en cada estado habían votado en elecciones recientes, de un total de más de 23 millones de votos por estado.
Es poco probable que la medida avance en el Senado controlado por los demócratas.
División partidista
Los republicanos de la Cámara se han mantenido firmemente a favor del proyecto de ley de Roy, H.R.8281.
En el pleno de la Cámara el miércoles, el presidente de la Cámara, Mike Johnson, un republicano de Luisiana, instó a sus colegas a aprobar el proyecto de ley, diciendo que era “uno de los votos más importantes que los miembros de esta cámara tomarán en toda su carrera.”
El mes pasado, la oficina de Johnson publicó un informe de 22 páginas afirmando que la Ley SAVE era crucial para la integridad de las elecciones estadounidenses.
Johnson culpó al Partido Demócrata por mantener “las fronteras estadounidenses abiertas a todos los países del planeta” y afirmó que los demócratas “quieren que los inmigrantes ilegales voten en nuestras elecciones.”
El lunes, la administración Biden emitió una Declaración de Política Administrativa en contra de la legislación, diciendo que no hay motivo de preocupación sobre la votación de no ciudadanos y que solo obstaculizaría los derechos de voto de los estadounidenses elegibles.
El representante Joe Morelle de Nueva York, el principal demócrata en el Comité de Administración de la Cámara, instó a sus colegas de la Cámara durante el debate en el pleno del miércoles a votar no al proyecto de ley, diciendo que sería devastador para todos los votantes estadounidenses.
“Este proyecto de ley trata de asustar a los estadounidenses, este proyecto de ley trata de silenciar a los estadounidenses, este proyecto de bill trata de privar de derechos a los estadounidenses”, dijo. “Este proyecto de ley trata de dañar aún más los cimientos de nuestra democracia.”
Pero el presidente del Comité de Administración de la Cámara, Bryan Steil, apoyó la legislación durante una audiencia del Comité de Reglas.
“En las últimas décadas, la fe de los estadounidenses en la integridad de nuestras elecciones ha disminuido y es responsabilidad del Congreso restaurar la confianza en nuestro sistema electoral”, dijo Steil, un republicano de Wisconsin. “La Ley SAVE haría exactamente eso.”
El líder de la mayoría republicana, Steve Scalise de Luisiana, en una conferencia de prensa el lunes, calificó el proyecto de ley como “una salvaguardia para garantizar que solo los ciudadanos estadounidenses voten en las elecciones de Estados Unidos.”
Implicaciones electorales
El líder de la minoría demócrata, Hakeem Jeffries de Nueva York, durante el debate en el pleno del miércoles, aludió a las implicaciones más amplias de la Ley SAVE, mirando hacia las elecciones de noviembre y la posibilidad de un segundo mandato para el presidente Joe Biden.
Dijo que los republicanos podrían usar el proyecto de ley “como una excusa, ya tratando de establecer una excusa para lo que pueda suceder en noviembre.”
Los defensores de los derechos de voto han expresado su preocupación por la Ley SAVE, diciendo que contiene muchas falsedades y teorías de conspiración que perpetúan puntos de vista extremos.
En una conferencia de prensa el martes, organizada por America’s Voice, una organización sin fines de lucro de defensa de los inmigrantes, Sean Morales-Doyle del Brennan Center for Justice dijo que el proyecto de ley juega con temas más amplios de racismo y xenofobia.
“También es una mentira muy dañina con un motivo ulterior: sentar las bases para desafiar los resultados legítimos de las elecciones en el futuro”, dijo.
Un miembro de la Cámara comparó el proyecto de ley con un “impuesto electoral de Jim Crow” durante el debate en el pleno. Jennifer McClellan, una demócrata de Virginia, dijo que “no conoce ningún documento de prueba de ciudadanía que no cueste dinero obtenerlo.”
Wesley Hunt, un republicano de Texas, respondió que “Jim Crow ha terminado.”
